No quiero ser yo defensor del diablo, pero me parece que este es un problema común a casi todas las marcas. Puedo poner como ejemplo mi coche anterior, un Peugeot 508 de última generación con navegador conectado que hasta te informaba, en tiempo real, de la saturación del tráfic. Pues bien, cada vez que iba desde Madrid a Andalucía y cogía la R4, había un punto entre Valdemoro y Aranjuez en que me indicaba que saliera de la autopista y me metiera por vaya usted a saber que carreteruchas aledañas. En el coche anterior, Ford Mondeo de 2016, siguiendo las indicaciones del navegador para ir a Tazones (Astrias), acabé en un prado, en lo alto de un monte, al borde de un acantilado. Eso si, estaba a 700 metros del pueblo.
En fin, que todos estos sistemas tienen fallos de bulto y debemos hacer también caso a nuestro propio sentido común y de orientación