Actualizo el título del hilo y mis impresiones, una vez transcurrido algo más de un semestre y de 17.000 kms con el V90CC D4
La principal novedad es que (afortunadamente) no ha habido incidencias ni problemas de ningún tipo, tampoco ruidos, grillos ni elementos que se desajusten o muestren signos de desgaste o deterioro. Todo funciona, fluye y se desenvuelve como el primer día.
En cuanto a consumibles, he repostado adblue recientemente (en surtidor) y por segunda vez, al haber llegado a la marca de 1/4 de depósito; unos 8l de cada vez, 16l en total, lo que da un consumo promedio de algo menos de 1l cada 1.000 kms en mi caso. Los neumáticos, Michelín LS3 en medida 235/55/18 mantienen una buena profundidad de dibujo, sin acusar más que una pequeña diferencia de desgaste entre tren delantero y trasero, menor de lo que esperaba teniendo en cuenta que el coche tiene una awd conectable y que frecuenta bastante la autovía (también carreteras de todo tipo y trazado y apenas caminos) se supone que con claro predominio de la tracción delantera. Me he planteado un posible cruce, para igualar desgastes, pero creo que me va a dar pereza.
En cuanto al consumo, sigue manteniendo un promedio similar de 7,1l algo lógico teniendo en cuenta que el tipo de uso no ha variado significativamente. Considero que es un consumo moderado para la envergadura, peso y prestaciones del coche, que además resulta muy sensible al tipo de conducción y permite conseguir consumos realmente bajos si ese es el propósito y sin necesidad de arrastrarse ni alejarse de los ritmos que permiten las limitaciones actuales. También permite ritmos más vivos sin que el consumo se dispare.
A destacar el aplomo, confort de marcha y aislamiento interior, tanto de ruidos como vibraciones, aspectos, todos ellos, estrechamente relacionados. La suavidad del cambio y las ayudas a la conducción, cuando el trazado lo permite (autovía con tráfico fluido en mi caso) junto con lo que aportan y proporcionan los asientos/butacones, terminan de contribuir a que el coche devore kms con rapidez y una inestimable sensación de seguridad y confort para el conductor y el pasaje. En lo que se refiere a los asientos, echo de menos algo más de sujección lateral, como la que ofrecían los de mi anterior 95 Vector, especialmente en trazados sinuosos, aunque la posicIón de conducción es buena, al igual que el surtido de huecos y la posición de los apoyos previstos para pies y brazos.
El tamaño exterior puede parecer un hándicap para tráfico urbano y en cierto modo lo es, pero resulta sorprendente lo bien que se maneja, gracias a su gran capacidad de giro y lo bien que se controlan visualmente sus apéndices, algo que se agradece también en las maniobras, mucho más ágiles y sencillas de lo que a priori cabía esperar (y temer). Por lo tanto, nada que objetar en este aspecto, sino al contrario, y sí destacar, a cambio, la amplitud interior, especialmente notable en las plazas traseras y la versatilidad que proporcionan el maletero y el portón, del que cabe destacar su gran ligereza, ya que está hecho en composite y que contribuye a un manejo rápido y sencillo (no tengo portón eléctrico, que me parecía más un incordio que otra cosa ya que lo utilizo con mucha frecuencia).
La pantallaca central, una vez habituado a su manejo (y habiéndole colocado un protector) se maneja de forma fluida e intuitiva y no plantea problemas. En cuanto a la pantalla del conductor, sí echo de menos la posibilidad de un mayor grado de personalización y que permita visualizar más información sobre el funcionamiento del coche, como puede ser el control de temperatura o la marcha engranada por el CA. A cambio, resulta muy útil poder visualizar el navegador entre los relojes y utilizar el control por voz, al menos para algunas funciones básicas.
En cuanto a los modos y ayudas a la conducción, el Autohold es lo único que casi no utilizo. Sí lo hago con los automatismos del limpia y las luces. El primero funciona razonablemente bien y el segundo para mí es casi perfecto; los cambios de luces perfectamente ajustados en cruces y alcances, el control adaptativo muy útil y eficaz, tanto más cuanto más fluido y menos intenso sea el tráfico y mejor en carretera que en autovía, lo cual no deja de ser lógico. Algo parecido ocurre con el PA y el modo ECO, que se adaptan muy bien al tipo de conducción propio de autovía y resultan superfluos en carretera. Para recorridos y tramos sinuosos, y cuando me lo pide el cuerpo, recurro al modo manual, aunque regulando con tipo la presión sobre el acelerador se puede ajustar bien el trabajo y ritmo del cambio a lo que uno pretende.
Así que, por el momento, como véis, pocas pegas se le pueden poner y la satisfacción es plena. Esperemos que dure
La principal novedad es que (afortunadamente) no ha habido incidencias ni problemas de ningún tipo, tampoco ruidos, grillos ni elementos que se desajusten o muestren signos de desgaste o deterioro. Todo funciona, fluye y se desenvuelve como el primer día.
En cuanto a consumibles, he repostado adblue recientemente (en surtidor) y por segunda vez, al haber llegado a la marca de 1/4 de depósito; unos 8l de cada vez, 16l en total, lo que da un consumo promedio de algo menos de 1l cada 1.000 kms en mi caso. Los neumáticos, Michelín LS3 en medida 235/55/18 mantienen una buena profundidad de dibujo, sin acusar más que una pequeña diferencia de desgaste entre tren delantero y trasero, menor de lo que esperaba teniendo en cuenta que el coche tiene una awd conectable y que frecuenta bastante la autovía (también carreteras de todo tipo y trazado y apenas caminos) se supone que con claro predominio de la tracción delantera. Me he planteado un posible cruce, para igualar desgastes, pero creo que me va a dar pereza.
En cuanto al consumo, sigue manteniendo un promedio similar de 7,1l algo lógico teniendo en cuenta que el tipo de uso no ha variado significativamente. Considero que es un consumo moderado para la envergadura, peso y prestaciones del coche, que además resulta muy sensible al tipo de conducción y permite conseguir consumos realmente bajos si ese es el propósito y sin necesidad de arrastrarse ni alejarse de los ritmos que permiten las limitaciones actuales. También permite ritmos más vivos sin que el consumo se dispare.
A destacar el aplomo, confort de marcha y aislamiento interior, tanto de ruidos como vibraciones, aspectos, todos ellos, estrechamente relacionados. La suavidad del cambio y las ayudas a la conducción, cuando el trazado lo permite (autovía con tráfico fluido en mi caso) junto con lo que aportan y proporcionan los asientos/butacones, terminan de contribuir a que el coche devore kms con rapidez y una inestimable sensación de seguridad y confort para el conductor y el pasaje. En lo que se refiere a los asientos, echo de menos algo más de sujección lateral, como la que ofrecían los de mi anterior 95 Vector, especialmente en trazados sinuosos, aunque la posicIón de conducción es buena, al igual que el surtido de huecos y la posición de los apoyos previstos para pies y brazos.
El tamaño exterior puede parecer un hándicap para tráfico urbano y en cierto modo lo es, pero resulta sorprendente lo bien que se maneja, gracias a su gran capacidad de giro y lo bien que se controlan visualmente sus apéndices, algo que se agradece también en las maniobras, mucho más ágiles y sencillas de lo que a priori cabía esperar (y temer). Por lo tanto, nada que objetar en este aspecto, sino al contrario, y sí destacar, a cambio, la amplitud interior, especialmente notable en las plazas traseras y la versatilidad que proporcionan el maletero y el portón, del que cabe destacar su gran ligereza, ya que está hecho en composite y que contribuye a un manejo rápido y sencillo (no tengo portón eléctrico, que me parecía más un incordio que otra cosa ya que lo utilizo con mucha frecuencia).
La pantallaca central, una vez habituado a su manejo (y habiéndole colocado un protector) se maneja de forma fluida e intuitiva y no plantea problemas. En cuanto a la pantalla del conductor, sí echo de menos la posibilidad de un mayor grado de personalización y que permita visualizar más información sobre el funcionamiento del coche, como puede ser el control de temperatura o la marcha engranada por el CA. A cambio, resulta muy útil poder visualizar el navegador entre los relojes y utilizar el control por voz, al menos para algunas funciones básicas.
En cuanto a los modos y ayudas a la conducción, el Autohold es lo único que casi no utilizo. Sí lo hago con los automatismos del limpia y las luces. El primero funciona razonablemente bien y el segundo para mí es casi perfecto; los cambios de luces perfectamente ajustados en cruces y alcances, el control adaptativo muy útil y eficaz, tanto más cuanto más fluido y menos intenso sea el tráfico y mejor en carretera que en autovía, lo cual no deja de ser lógico. Algo parecido ocurre con el PA y el modo ECO, que se adaptan muy bien al tipo de conducción propio de autovía y resultan superfluos en carretera. Para recorridos y tramos sinuosos, y cuando me lo pide el cuerpo, recurro al modo manual, aunque regulando con tipo la presión sobre el acelerador se puede ajustar bien el trabajo y ritmo del cambio a lo que uno pretende.
Así que, por el momento, como véis, pocas pegas se le pueden poner y la satisfacción es plena. Esperemos que dure
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