Muy buenas foreros,
Hacia tiempo que no comentaba nada por aquí, pero hoy vuelvo porque quiero saber vuestra opinión sobre un tema.
Hace cosa de un mes cambié el tanque por un Volvo XC40 híbrido enchufable, versión T5 Inscription, y llevo notando algo bastante molesto al coche desde el principio.
Circulando en vías rápidas a ritmos legales se nota claramente una vibración en todo el habitáculo que podría describir como constantes pequeños rebotes de la suspensión. Podría ser algo similar a cuando alguna rueda o elemento de la transmisión, suspensión, frenos, etc.., está desequilibrado.
La cuestión es que ya han sido equilibradas las 4 ruedas en Volvo y el coche sigue exactamente igual.
Como os digo a veces lo percibo como continuos rebotes de la suspensión, como si el coche acusara en exceso todas las irregularidades del asfalto y las transmitiera al habitáculo de forma excesivamente directa, llegando a ser bastante incómodo.
En la propia Volvo me han comentado que este modelo lleva unos reglajes de suspensión más duros (son 262 CV) lo que según ellos podría explicarlo, pero no entiendo entonces porque en todas las pruebas que he visto de esta versión una de las características más apreciadas sea la comodidad de la suspensión y su buen filtrado.
¿A alguien le pasa algo parecido?
¿Podría la dureza de la suspensión ser la causa?
Muchas gracias foreros.
Hacia tiempo que no comentaba nada por aquí, pero hoy vuelvo porque quiero saber vuestra opinión sobre un tema.
Hace cosa de un mes cambié el tanque por un Volvo XC40 híbrido enchufable, versión T5 Inscription, y llevo notando algo bastante molesto al coche desde el principio.
Circulando en vías rápidas a ritmos legales se nota claramente una vibración en todo el habitáculo que podría describir como constantes pequeños rebotes de la suspensión. Podría ser algo similar a cuando alguna rueda o elemento de la transmisión, suspensión, frenos, etc.., está desequilibrado.
La cuestión es que ya han sido equilibradas las 4 ruedas en Volvo y el coche sigue exactamente igual.
Como os digo a veces lo percibo como continuos rebotes de la suspensión, como si el coche acusara en exceso todas las irregularidades del asfalto y las transmitiera al habitáculo de forma excesivamente directa, llegando a ser bastante incómodo.
En la propia Volvo me han comentado que este modelo lleva unos reglajes de suspensión más duros (son 262 CV) lo que según ellos podría explicarlo, pero no entiendo entonces porque en todas las pruebas que he visto de esta versión una de las características más apreciadas sea la comodidad de la suspensión y su buen filtrado.
¿A alguien le pasa algo parecido?
¿Podría la dureza de la suspensión ser la causa?
Muchas gracias foreros.