Lo que dice este artículo sí es acertado, a diferencia del de Autopista, que más que mentir es que está pésimamente escrito e induce a error.
El resumen es que puede ser útil quitar el ESP cuando:
- muchas ruedas patinan y no te deja arrancar. Al quitarlo no se frenan y esperas que, al girar a lo loco y sacudirse el coche, con algo de suerte alguna agarre un poco y puedas salir del atasco. Tras lo cual lo conectas de nuevo. Si no tienes suerte lo que haces es un agujero debajo de cada rueda y empanzas el coche, en cuyo caso, te toca ir a buscar un tractor que te ayude a despegarlo. (Digo en barro, en nieve esto nunca me ha pasado, aunque supongo que será igual.)
- Quieres ir con mucha inercia (mangado) por una zona de bajísima adherencia (nieve, barro o arena), dejando que todas las ruedas deslicen. A veces podrá ser la única manera de pasar una zona de esas, coger velocidad y darle caña sin ESP. Eso sí, tu control de trayectoria será pésimo, y yo solo haría esto si el barrizal ( o "nievazal") es amplio sin peligros a los lados. Dicho por experiencia, tras un bollo en mi 4x4 con una rama de árbol por hacer esas cosas donde no se debería (¡qué tonto es uno de joven!)
- Quieres jugar a trompear
Ninguna de esas cosas es para conductor "normal", que va por la carretera
y quiere seguir en ella. En ese caso, lo mejor es no quitar el ESP por más que diga el becario de Autopista.